La organización Oxfam denuncia: "Nunca hemos visto una crisis humanitaria como la de Gaza"

"Lo que está sucediendo hoy en Gaza no tiene precedentes", "ningún hecho justifica el castigo colectivo de 2 millones de personas ni niega la responsabilidad de Israel de satisfacer estas necesidades básicas de los civiles", señala el director de Oxfam en Gran Bretaña.

El diario británico The Guardian publicó este jueves una columna de Dhananjayan Sriskandarajah, director ejecutivo de Oxfam en Gran Bretaña, denunciando la situación en la Franja de Gaza. Allí señala que "En lugar de gestionar servicios de ayuda, nuestro personal corre para salvar sus vidas. Necesitamos un alto el fuego ahora, por el bien tanto de los palestinos como de los israelíes".

En el texto publicado Sriskandarajah señala que "Hay muchas esperanzas puestas en la apertura del cruce de Rafah para permitir la entrada de ayuda a Gaza desde Egipto. Pero 20 camiones no van a ser suficientes para abordar la catástrofe humanitaria que estamos viendo desarrollarse en esta Franja de Gaza asediada".

Oxfam lleva décadas proporcionando ayuda humanitaria a personas atrapadas en una situación de guerra, como lo hicieron en Somalia, Yemen y Siria, y desde hace décadas en Palestina. Pero el director de la organización dice que "lo que está sucediendo hoy en Gaza no tiene precedentes".

También denuncia que "en otros lugares, mis valientes colegas estarían dirigiendo servicios de socorro. Hoy en Gaza están huyendo para salvar sus vidas. En otros lugares estaríamos en contacto constante con ellos, pero hoy en Gaza sus teléfonos se están quedando sin batería porque se ha cortado la electricidad. En otros lugares, compartiríamos nuestros datos de ubicación con los combatientes para mantener seguros al personal y a los civiles; hoy en Gaza nadie está a salvo".

Sobre el bombardeo del hospital en Gaza señala que "la pérdida de al menos 500 vidas es una prueba de que se ha cometido un atroz crimen de guerra mediante ataques deliberados contra infraestructuras civiles, o es una prueba de que en un lugar tan densamente poblado como Gaza, es absolutamente imposible minimizar la pérdida de vidas civiles".

Sriskandarajah también escribe sobre la situación de la infraestructura y los servicios cortados por Israel: "en lo que respecta al agua es potencialmente aún más mortal. A más de 2 millones de personas, la mitad de ellas niños, se les niega uno de los elementos esenciales de la vida; se ven obligados a beber agua sucia o a vivir sin ella. Sin baños que funcionen y con desechos acumulándose en las calles, Gaza corre el riesgo de convertirse en un caldo de cultivo para el cólera y otras enfermedades mortales", y continúa "según la ONU, hasta el momento al menos seis de los pozos de agua de Gaza, tres estaciones de bombeo de agua y un depósito de agua han resultado dañados. Sus tres plantas desalinizadoras han dejado de suministrar agua por falta de combustible y electricidad; sus seis plantas de tratamiento de aguas residuales ahora no están operativas. No hay agua para 3.500 pacientes hospitalizados en 35 hospitales, y alrededor de 400.000 desplazados internos que se refugian en 160 escuelas están en riesgo inmediato. La ONU estima que la población de Gaza ahora tiene acceso a un promedio de sólo 3 litros de agua al día, cuando una persona necesita entre 50 y 100 para sus necesidades básicas de salud".

El director de Oxfam GB concluye que "ningún hecho justifica el castigo colectivo de 2 millones de personas ni niega la responsabilidad de Israel de satisfacer estas necesidades básicas de los civiles. Los palestinos en Gaza literalmente no tienen adónde ir, y nadie parece dispuesto o capaz de ayudar mientras las familias enfrentan la muerte por deshidratación y enfermedades".

De esta manera Oxfam se suma a distintas organizaciones que vienen denunciando la situación en la Franja de Gaza, el corte de los servicios esenciales por parte de Israel y los continuos bombardeos de su Ejército que en los últimos 13 días se cobró la vida de al menos 3.785 palestinos y más de 12.493 han resultado heridos. De esos fallecidos, al menos 1.524 son menores de edad, 1.000 son mujeres y 120 son ancianos. (LID)