Siempre se ha sostenido que la función principal de toda organización política es garantizar jurados probos a todo habitante al que otros ciudadanos denunciaren por cualquier motivo. Pero falta saber reconocer a esos jurados. Y a la hora de preguntar nos cuestionamos si es justo enviar a la cárcel a las personas. ¿Se consigue con ello el doble fin que se trata de obtener; impedir que se repita el acto antisocial y mejorar al hombre culpable de un acto de violencia contra su semejante?
Miles de (...)