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La inflación no para: en marzo fue de 2,3 %

Este jueves el Indec informó que los precios tuvieron una suba de 2,3 % en el mes de marzo. Respecto de diciembre acumulan un incremento de 6,7 %, casi la mitad de la meta del año.

12 de abril de 2018| Esteban Mercatante |

Este jueves el Indec informó que los precios tuvieron una suba de 2,3 % en el mes de marzo. Respecto de diciembre acumulan un incremento de 6,7 %, casi la mitad de la meta del año.

El nivel general del Índice de Precios al Consumidor (IPC) representativo del total de hogares del país registró en el mes de marzo una variación de 2,3 % con relación al mes anterior, según informó el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).

De esta forma, de acuerdo a lo informado por el organismo, en el primer trimestre los precios acumulan un incremento de 6,7 %, la mitad de la meta definida para 2018 por el Banco Central de la República Argentina (BCRA).
Respecto de igual mes de 2017, el IPC registra una variación de 25,4 %.
Los rubros que lideraron los aumentos del mes de marzo fueron educación (13,8 %), equipamiento y mantenimiento del hogar (4,5 %), prendas de vestir y calzado (4,4 %), seguidos por comunicación (2,7 %) y alimentos y bebidas no alcohólicas (2,3 %).

En el trimestre, los rubros de mayor incremento de precios respecto de diciembre fueron educación (16,7 %), comunicación (14,2 %), transporte (8,7 %), y equipamiento y mantenimiento del hogar.

Respecto de un año atrás, los mayores aumentos se observan en vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (48 %), comunicación (38,4 %), salud (25,8 %), y transporte (24,6 %).

¿Los aumentos de precios se desaceleran?

Un dato que destaca de lo difundido este jueves por el Indec es que la inflación anual superó el incremento de precios registrado en 2017 (25,4 % de marzo respecto de igual mes del año anterior contra 24,8 % durante todo 2017).

Además, el componente núcleo de la inflación, es decir aquel que excluye las variaciones estacionales (1,6 %) y reguladas (2 %), fue el de mayo incremento en marzo, 2,6 %. Este es el componente al que más atención presta el BCRA al momento de tomar decisiones de política monetaria, y son sus variaciones lo determinante para la autoridad monetaria a la hora de prever la evolución de los precios. El mismo no muestra la desaceleración que busca ver el gobierno.

De esta forma, la afirmación de que la inflación anual se estaría desacelerando queda sumamente cuestionada. La expectativa de que los precios puedan cerrar el año sin superar nuevamente la barrera del 20 % de aumento resulta cada vez más improbable.

Echando nafta al fuego

No resulta sorprendente para nadie el resultado informado ayer por el Indec. Aunque algunos analistas esperaban un valor algo más cercano a 2 % que a 2,5 %, la diferencia era cuestión de décimas.

Se descontaba este nivel porque sigue impactando en los precios la depreciación que tuvo el peso respecto del dólar en el arranque del año. Esto afecta los precios de los bienes importados, y también de los que tienen precios dolarizados como es el caso de muchos alimentos y los combustibles. También impacta sobre toda la cadena de producción por el peso de los insumos importados y los costos del transporte que se encarece de la mano de las naftas. El fuerte incremento de los precios mayoristas en febrero, anticipaba además el aumento de marzo.

También es de destacar la seguidilla de aumentos definidos por el gobierno para las tarifas de los servicios públicos, el transporte y el combustible. Como hubo nueva ronda de aumentos decididos por el gobierno en varios de estos rubros para abril (desde el primer día del mes se paga más en todo el transporte en CABA y GBA), se espera que el cuarto mes del año también tenga al IPC subiendo fuerte.

Algunos de los rubros de mayor incidencia vuelven a mostrar que no es cierto el planteo de que la persistente inflación se explique porque el gobierno esté fracasando en su política antiinlfacionaria, como dicen muchos críticos que piden un ajuste más decidido del gasto público. Tampoco es verdadero que los motivos respondan a que el gobierno esté yendo lento con algunas iniciativas para frenar los precios porque sea demasiado "gradualista" como afirman funcionarios de la administración de Macri o el jefe del BCRA Federico Sturzenegger. Este último afirmó que el gobierno podría haber bajado la inflación drásticamente en pocos meses pero decidió no hacerlo por los costos económicos. Hace pocos meses el ministro Dujovne pareció desmentirlo, cuando dijo que en realidad no disponen de muchas herramientas para bajar los precios.

La explicación va por otro lado. Al contrario de estar haciendo "demasiado poco" para frenar la inflación, el gobierno está activamente impulsando incrementos en rubros que impactan fuerte en el nivel general de precios, mediante los tarifazos y los ajustes del tipo de cambio realizados para complacer a los sojeros, que van de la mano de una baja de retenciones que también beneficia al agropower y contribuye a recalentar los precios. (LID)

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