Tomas y desalojos, consecuencias del déficit habitacional

Las reiterativas tomas de tierras y los desalojos vehementes, para expulsar a los sectores más vulnerables de la sociedad organizada, que no tienen vivienda, es una constante en las provincias norteñas de Salta y Jujuy. En la primera, según datos oficiales, la falta de vivienda afecta a más de 60 mil familias.

Hacinados en precarias viviendas, muchos de ellos alojados por sus padres o familiares. Otros, desesperados ante el aumento de alquileres, se organizan y no dudan en participar de una toma. Son los pobres del norte argentino que buscan sobrevivir.

En el caso de Salvador Mazza, donde la falta de trabajo genuino, degrada a sus habitantes, que en mayor número deben dedicarse al bagayeo, al paso de mercaderías, como bolsas de harina, que cargan en sus hombros desde argentina a Bolivia por no más de cinco pesos. Con jornales que solo alcanzan para comer.

Los reclamos por falta de viviendas, realizadas al estado por estos sectores vulnerables, son reiterativos, constituyendo a los ejecutivos provinciales, en entes caracterizados por su inactividad, e ineficiencia, reflejado ante el grito de los sin techo.

Queremos que cumpla la promesa

En el barrio San Martin de la ciudad fronteriza de Salvador Mazza, unas 35 familias, organizaron una toma, que abarco tres hectáreas, de propiedad de Rubén Méndez intendente de esta ciudad. Los pobres, argumentaban que durante la campaña política el propio Méndez, les ofrecía esas tierras a cambio del voto. “Estas tierras siempre fueron de Méndez, las prometió durante la campaña a quienes lo votáramos, para beneficio de él. Y ahora que lo necesitamos nos da la espalda. Nosotros los vecinos que no tenemos donde vivir, necesitamos un pedazo de tierra, un techo digno para nuestros hijos, por eso estamos acá” Decía Carlos, agobiado e indignado ante la exclusión cotidiana y al final anunciado del reclamo.

“Donde está el intendente que prometió tantas cosas en el pueblo, que iba a dar un futuro a los chicos, a los jóvenes, donde está ahora”. Manifestaba Pedro un joven desocupado.

Para Juan, otro indignado, responsabilizaba a las autoridades y al intendente de los atropellos de las fuerzas de seguridad. “Donde está el intendente Méndez, ahora queremos que cumpla la promesa, no tenemos trabajo, no tenemos vivienda digna, por eso estamos acá, y recibimos un atropellos por parte de la policía. Nosotros vamos a ponernos firmes y manifestaremos en el municipio, reclamando nuestro derechos que nos corresponden, rechazamos este proceder autoritario”

Tolerancia cero a las tomas

Durante la jornada del jueves, 150 familias jujeñas sin vivienda tomaron un predio en el Barrio Alto Comedero, la policía actuó de inmediato, sin notificar judicialmente del desalojo, según los sin techos. Lo que sería confirmado por el ministro de Infraestructura Servicios Públicos tierra y Vivienda, Jorge Rizzotti que manifestó públicamente que ““el gobierno de Jujuy va a tener tolerancia cero con la usurpación”.

Rizzotti también advirtió, “desde el Gobierno de Jujuy le pedimos a la gente que no usurpe terrenos, estamos trabajando para dar las soluciones, pero esta no es una alternativa licita, por el contrario la usurpación les va a generar inconvenientes a futuro porque va a quedar asentado este antecedente a la hora de solicitar ingresar al programa de “Un lote para cada Familia”.

“La promesa de un lote para cada familia, nunca se cumplió, y ahora vienen a desalojarnos” Expresa María, durante el desalojo en Jujuy, agregando. ”Por eso estamos acá, estas son tierras fiscales. Porque no se le da a la gente que necesita, porque vienen a desalojarnos, porque el gobierno, como él -dijo en alusión al gobernador Gerardo Morales- y nunca se presentó en la toma.”

Jacinto, ofuscado ante el desalojo aclaro. “Nosotros somos cinto cincuenta familias que ahora estamos siendo desalojados. Nosotros estamos acá porque necesitamos, y ellos dicen en la televisión que estamos en la toma para vender los lotes, lo que no es verdad, estamos en la toma porque necesitamos vivienda digna”.

Tanto en Salta como en Jujuy, durante las campañas electorales la promesa de lote y vivienda hasta ahora solo fueron eso, promesas. Y ante el incumplimiento y la desesperación de la los sectores más desprotegidos y cuando estos toman la decisión colectiva de tomar tierras fiscales por necesidad, la solución de los gobiernos es la misma, no permitir ilícitos, judicializando el reclamo y amedrentando a los que tomen esa decisión.

Desalojo Salta

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