Sube el riesgo: para Moody’s el sistema bancario argentino es “muy débil”

La calificación de Moody’s en la semana debut del cepo cambiario, rebaja el perfil macro para el sistema bancario argentino a "muy débil" intentando reflejar el ambiente operativo más desafiante para bancos y la incertidumbre respecto a las condiciones de fondeo.

A pesar de los días de relativa “recuperación en los mercados” tras la implementación del cepo cambiario, este jueves la calificadora Moodys cambió el perfil del sistema bancario argentino a “muy débil”.

Esta rebaja expresa una coyuntura operativa más desafiante para los bancos y la incertidumbre relacionada con las condiciones de fondeo. Refiriéndose principalmente a aquellas que derivan de las crecientes presiones en la estructura de financiamiento y liquidez del país.

La semana pasada Hernán Lacunza anunció un plan de reestructuración de la deuda, incluyendo el default selectivo respecto a los bonos de corto plazo. Luego del fuerte impacto en los mercados por estos anuncios y del aumento del retiro de depósitos en dólares, por DNU se aplicó un tardío control de cambios, pues desde las PASO se perdieron más de USD 13.000 millones de las reservas del Central.

Ante este contexto, Moody’s bajó las calificaciones de deuda senior no garantizada para un grupo de bancos y una emisora de tarjetas de crédito de la Argentina. Así las calificaciones del banco Macro, Hipotecario, Supervielle y Ciudad de Buenos Aires y para Tarjeta Naranja pasaron de B2 a Caa2, sentenció el informe de Moody’s.

También se ajustó a la baja la calificación de programas de deuda senior no garantizada de Banco de Galicia y Banco Macro a Caa2 desde B2. Y recortó las calificaciones de deuda subordinada en moneda extranjera a Caa3 desde B3 asignadas a Banco de Galicia.

Estas acciones de calificación son consecuencia del anuncio por parte de Moody s Latin America que ha realizado una acción de calificación similar sobre las calificaciones de depósitos en moneda local de los bancos.

Estos recortes en las notas emitidas por Moody’s indican que a pesar de la relativa recuperación registrada en los “mercados” esta semana, los problemas de fondo ocasionados por un altísimo endeudamiento se agudizan. Ante la inestable transición política desatada desde las PASO, la pérdida de “confianza” de los especuladores va en aumento. Tras la devaluación mayor al 30 % en un día, las medidas desesperadas del gobierno intentan evitar el estallido de una crisis bancaria- que no se puede descartar- y social antes de octubre. (LID)