Luz y Fuerza: Impostura Oportunista o Cambio de Estrategia

Para el Miércoles 8 de Abril la Federación Argentina de Trabajadores de Luz y Fuerza ( FATLyF) ha convocado a un paro por las siguientes reivindicaciones: En contra de la precarización Laboral, Por la eliminación del Impuesto al salario y la vigencia del CCT 36/75 ( Convenio Colectivo de Trabajo) entre otras cosas.

Debe ser el primer Paro que se convoca solo como Federación en mas de dos décadas. Lo que se debe analizar a la luz de este cambio de rumbo es lo que como responsabilidad le toca a la FATLyF sobre lo que le pasa a sus afiliados, o a los trabajadores de la rama eléctrica en general.

La FATLyF votó en un congreso en la época menemista participar del proceso privatizador pergeñado como parte del plan de entrega de las empresas estatales encaradas por el riojano. Asi es que la FATLYF comienza un derrotero que la lleva a gerenciar un importante sector de lo que se conoce como Mercado Electrico. Empresas como TRANSNOA SA, que transporta la energía en todo el NOA, y TRANSNEA SA en la zona del Litoral son en un 100 x ciento de la FATLyF.

En estas empresas se llego al colmo de la precarización laboral. Luego de cesantear a cientos de trabajadores sobre la base del extorsivo Retiro Voluntario o no tan voluntario, se “armaron “ empresas que tercerizaron a los nuevos trabajadores. Alli aparecieron Montelectro, Megaelec, Asisnort, SIN SA, CON SA, COTLyF en Salta, solo por nombrar algunas, que integran junto a decenas de empresas de otros rubros lo que se conoce como el Holding de Luz y Fuerza.

Es decir que son empresas que violaron lo que establece el CCT 36/75, que dice en su Art 1 que el Convenio abarca a TODOS los trabajadores de la rama eléctrica. Asombrosamente , La Federación armó sus propias empresas para violar los derechos de sus propios afiliados.

Es conocido el caso del “levantamiento” de los trabajadores de TRANSNOA SALTA que reclamaron por la vigencia del CCT 36/75, y que como represalia ante tanta osadía despide al delegado electo de los trabajadores el que a partir de la acción judicial logra un fallo que Ordena su reincorporación a la empresa de la Federacion, TRANSNOA SA. En esta empresa se congelo por 20 años algunos conceptos remunerativos de los trabajadores. Lo extremadamente llamativo es que en existencia de un fallo de la justicia hace mas de un año, ni el gremio, o sea Luz y Fuerza Salta, ni la FATLyF, hacen mención alguna en este paro sobre la Reincorporación de Pepe Barraza, el delegado despedido, precisamente por luchar reclamando lo que hoy dicen reclamar con este paro.

Podríamos preguntarnos, ¿Existe la posibilidad de que la nueva gestión de la FATLyF encabezada por el chaqueño Guillermo Moser se oriente a revertir un proceso de superexplotacion de los trabajadores ?

Quizas la respuesta surge inmediatamente a partir de que no se menciona nada respecto de hacer valer un derecho de un trabajador que tiene un fallo judicial ya a favor.

Si no hay nada en ese sentido lo que uno podría presumir es que se trata de una maniobra para lavarle la cara a la FATLyF ante los trabajadores olvidándose de los millones de pesos que se les adeuda a los trabajadores precisamente por la inaplicabilidad del CCT 36/75, que esta Federación debe hacer respetar.

Por otro lado quizás se apunte a reposicionarse como gremio con un espacio de poder ante el gobierno y en la perspectiva de entrar a tallar en los espacios de las central obrera oficialista (CGT).

El paro es un arma que los trabajadores debemos retomar para hacer valer nuestros derechos, pero no deben omitir que la consigna de la FATLyF “Por los derechos del trabajador” sea efectivamente cumplido para todos los trabajadores. Si no se actúa en ese sentido todo resultara una impostura de los dirigentes. Si hay un viraje real en la política gremial esta será valida solo a partir de la participación asamblearia de los trabajadores.

El Paro debe ser activo y contundente además plantear la estatización del sistema bajo control de usuarios y trabajadores para terminar con las políticas que llevan al sistema al colapso. Para terminar con el manejo nada limpio de los 7.500 millones de dólares que anualmente se destinan al sector eléctrico.