Bajo el mando del FMI, más de la mitad de los niños y adolescentes son pobres

Según Cifra, el 50,8 % de los niños, niñas y adolescentes crece en hogares con ingresos bajo la línea de pobreza. Son las consecuencias del plan de ajuste impuesto por el organismo.

El dato más cruel de la crisis, el aumento de la pobreza. El Centro de Investigación y Formación de la República Argentina (Cifra-CTA) reveló que en el primer trimestre de este año, el 34,4 % de las personas perteneció a hogares cuyos ingresos no superaron el nivel de la línea de pobreza. Es decir que, son 15,4 millones de pobres.

De la mano del FMI hubo un incremento interanual, de 8,8 puntos, que significa que hay 4 millones de personas más en condición de pobreza en comparación con el mismo período del año pasado.

Cifra estimó el incremento de la pobreza a partir de la utilización de la base de datos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del Indec. Los datos de pobreza e indigencia publicados por el organismo oficial se conocerán recién a fin de septiembre.

La situación es más grave para los niños, niñas y adolescentes. Más de la mitad de ellos vive en hogares con ingresos por debajo de la línea de pobreza. Esto significa que la pobreza afecta al 50,8 % de los menores de 18 años.

En tanto, la indigencia en el primer trimestre de 2019 alcanzó al 7,2 % de la población. Es decir, que hay 3,2 millones de indigentes, ni si quiera llegan a adquirir la canasta alimentaria básica. Con respecto al primer trimestre de 2018 hubo un millón más de indigentes.

Como sucede con la pobreza, los más castigados son los niños, niñas y adolescentes. Entre los menores de 18 años, la incidencia de la indigencia alcanzó al 11,8 % en el primer trimestre de este año.

La crisis y el ajuste del FMI provocaron un aumento de la pobreza, de la desocupación deteriorando las condiciones de vida del pueblo trabajador. (LID)