Flora era la grotesca “empleada pública” que maltrataba al público y mostraba su total ineficiencia y la burocracia del Estado sin ponerse colorada. Fue uno de los famosos personajes con el que el actor cómico Gasalla supo ganar las pantallas del rating en pleno menemismo. La empleada públical era uno de los personajes más importantes. La calidad del cómico no está en discusión, pero ¿qué había detrás? Toda una postura ideológica. Era una gran mano desde "la caja boba", necesaria para el (…)