Salta | | Estado del Tiempo
| Usuarios Acceso a Usuarios
| RSS Suscripción a RSS

Participación del Estado en empresas que subsidia: puro humo progresista

La diputada Fernanda Vallejos planteó, a partir de un hilo de Twitter, la posibilidad de que el Estado tuviera participación en las empresas que pidieran el ATP, el Gobierno se desmarcó rápido y la oposición puso el grito en el cielo. ¿Era para tanto alboroto?

22 de mayo de 2020

La diputada Fernanda Vallejos, en hilo de tuits planteó la posibilidad de que el Estado tomara participación accionaria en “grandes grupos económicos” que requirieran el aporte del ATP. Explicó, como criterio de exclusión, que no sean empresas “que operan offshore, fugan divisas y evitan tributar lo que les corresponde al fisco argentino”

En una entrevista con Novaresio por el canal América, explicó más profundamente cuál era la “idea” que había expresado desde la red social del pajarito azul.

Explicó que era una medida “necesaria en el medio de la crisis” y que tomaba la idea de otros gobiernos europeos que plantearon cuestiones similares. Vallejos aclaró la intención es que la asistencia estatal para el pago de salarios, de concretarse, se “haga no como un regalo a esas empresas, sino a cambio de una participación en el capital de las compañías”.

Durante el día la oposición de derecha y algunas figuras del empresariado local, pusieron el grito en cielo. El titular de Swiss Medical, Claudio Belocopitt, dijo que era “absurdo” y desde algunas figuras de Juntos Por el Cambio se lanzaron frases como “expropiación”, “confiscación”. Les faltó vociferar “comunismo” para completar el kit de frases comunes.

Por la parte del Gobierno, salieron a desmarcarse de Vallejos. Según el diario Clarín fuentes cercanas al jefe de gabinete, Santiago Cafiero, dijeron que “no vimos el proyecto ni se estudió en el Ejecutivo”. Desde el mismo diario se afirma que fuentes de la Casa Rosada declararon que el Gobierno no “le dará impulso al proyecto de la economista y diputada del Frente de Todos".

La misma Vallejos se ocupó de bajarle precio a sus declaraciones y afirmó que el proyecto no lo había discutido con el Ejecutivo, ni con Cristina Fernández de Kirchner ni con Alberto Fernández y afirmó que ella solamente había “expresado una idea" y que no necesariamente lo convertiría en proyecto de ley.

Pero toda la controversia ¿realmente valía la pena? Si nos detenemos en las propias palabras de Vallejos, la medida que propone lejos está de ser algo que podría llegar a afectar a ningún empresario. Ella misma explicó que “intentó hacer una reflexión más amplia sobre el rol del desarrollo productivo”.

"De ninguna manera se está diciendo que el Estado se tiene que quedar con las empresas que recibieron el ATP", siguió la diputada y finalmente aseguró que “si el Estado decide subsidiar a grandes grupos, sería razonable”.

Y aquí está la verdadera cara de la “reflexión” de Vallejos. Lo que ella propone simplemente, es algo común en la relación entre el Estado y las empresas: que el primero subsidie a los segundos. Algo que durante el kirchnerismo fue una práctica habitual, cuando se les dio millones de dólares a las empresas privatizadas de servicios públicos, por nombrar un ejemplo.

Esto, por más que algunos trasnochados vean rasgos de un afán “expropiador”, no es más que un gran regalo a los empresarios y que en el pasado reciente le ha costado miles de millones de dólares al Estado.

No es más que la continuidad de la lógica, con una fraseología de izquierda, con la que se viene manejando el Gobierno, que viene de entregar indiscriminadamente beneficios a empresas que facturan en dólares y se embolsan cuantiosas ganancias todos los meses (incluso a la Sociedad Rural).

Hoy mismo por la mañana, el diputado del Frente de Izquierda, Nicolás del Caño ironizaba con que Guzmán evaluaba la posibilidad de incluir en la ATP a Black Rock.

Aunque desde algunas figuras del oficialismo como Carlos Heller, Eduardo Fernández o la misma Vallejos pretendan tener iniciativas “progres”, no pueden tapar la realidad de que el Gobierno, mientras tomó algunas tibias medidas sociales (como el IFE) en los hechos les están dando grandes beneficios a grandes empresarios. Mientras, del otro lado, la pobreza no hace más que aumentar. Por Matthias Flammenman

Publicidad
Publicite aqui
Publicite Aqui

Datos de Contacto:
Cel: 3874152946
E-mail: redaccion@copenoa.com.ar

Libros: Orden, Represión y Muerte

Orden, Represión y muerte

Diario de la criminalización de la protesta social en Salta - Marco Diaz Muñoz

Portada | General | Politica | Policial | D.D.H.H. | Cultura | País | América Latina | Mundo | Pueblos Originarios

Copyright 2001 - 2010 - Todos los derechos Reservados - copenoa.com.ar