Italia. A los 86 años muere Silvio Berlusconi, figura emblemática de la derecha europea

El empresario y político de derecha fue primer ministro de Italia en tres ocasiones. Actualmente era senador y había formado parte de la coalición que permitió el triunfo de la ultraderechista Giorgia Meloni. Padecía leucemia mielomonocítica crónica.

El dirigente de derecha había sido ingresado en un centro médico el viernes pasado. Pocas semanas antes había salido de una internación que se extendió por 45 días, a causa de una infección pulmonar. La misma era resultado de un cuadro de leucemia crónica que sufría.

Berlusconi fue el símbolo de una época política en Italia. A lo largo de su carrera política fue tres veces primer ministro del país, al frente de diversas coaliciones de derecha. En 1994 había creado Forza Italia, el agrupamiento de centro-derecha abiertamente libertal, con el que intervino en la escena política nacional por décadas.

En las últimas elecciones generales celebradas en Italia, ese partido fue parte de la coalición que llevó al poder a la ultraderechista Giorgia Meloni. La actual primera ministra es una dirigente política profundamente reaccionaria, que defiende abiertamente el racismo y la xenofobia. A tal punto que llegó a tomar en tono de burla un naugrafio que terminó en el fallecimiento de 72 personas, incluyendo más de 30 niños y niñas.

Forza Italia siempre apareció vinculada a Berlusconi, quien nunca definió algún posible sucesor o sucesora como cabeza de la formación. Ahora, con la muerte del empresario, el futuro del agrupamiento político está por verse.

Berlusconi fue, también, un importante empresario, ligado a los medios y a los negocios en el mundo del fútbol, entre otros ámbitos. Había iniciado su trayectoria en el sector de la construcción. Posteriormente, extendió su influencia a otras áreas, entre las que se encuentran el fútbol y los grandes medios de comunicación. Reseñando este aspecto, el diario español El País consignó que "revolucionó la comunicación y la modernización ―para bien o para mal― de la televisión, fundó el primer partido/empresa más basado en las leyes del mercado que en las viejas ideologías ―él sí inventó el eslogan Comunismo o libertad― e instauró una cultura del ascenso y el éxito, del compadreo y el nepotismo".

Berlusconi fue investigado en numerosas ocasiones por sus vínculos con la mafia. En 2013 fue condenado por fraude fiscal. Además, estuvo en el centro de las críticas en muchísimas ocasiones a raíz de su vida privada.

Su figura política aparece ligada a la ideología liberal, como el empresario que "se hizo a sí mismo". Una ideología meritocrática que se extendió por el mundo en las décadas de ascenso del neoliberalismo. En ese sistema de sentidos comunes, el invididualismo ocupa un lugar central. Sin embargo, esas ideas se chocan cada vez más con la realidad palpable: el capitalismo condena crecientemente a millones a la miseria y a múltiples padecimientos. No hay salidas individuales dentro de un sistema que se sostiene en la explotación de millones para que ganen unos pocos.