Dietas millonarias. Aún dejando de lado el nuevo aumento, senadores y senadoras seguirán cobrando $ 8 millones por mes

El repudio fue extendido y obligó a este giro. Villarruel convocó a una sesión especial el jueves para tratar el tema. Sigue la interna dentro del Gobierno. Todo esto ocurre mientras la mayoría trabajadora hace malabares para llegar a fin de mes.

El repudio pudo más. Este martes, los senadores y senadoras de distintos bloques empezaron a discutir que darán marcha atrás con el aumento que llevaba sus dietas a $ 9 millones. La cifra equivale a aproximadamente 30 jubilaciones mínimas.

Sin embargo, aun con esa rebaja, los y las integrantes del Senado nacional seguirán cobrando cerca de $ 8 millones por mes. Es decir, sus ingresos mensuales seguirán estando en montos que equivalen a decenas de veces lo que cobran la inmensa mayoría de los jubilados y jubiladas. Se trata de una casta política que tiene ingresos millonarios, acorde a su función de legislar en función de los intereses del gran empresariado y el capital financiero internacional.

A comienzo de año los senadores nacionales cobraban una dieta de $ 1,9 millones. Con la nueva suba, el monto pasaba a ser de $ 9 millones en bruto. Es decir, sus ingresos se había multiplicado por más del 400%.

El lunes por la tarde se había dado a conocer el nuevo aumento que recibirán las senadoras y los senadores. Se trataba de una suba atada a los incrementos de la paritaria de los trabajadores del Congreso. En sintonía con la administración pública nacional, en la Comisión Negociadora paritaria del Congreso se acordó un aumento de 3,5% por julio y de 3% por agosto.

Estas subas llegan como un verdadero regalo tras aprobar la Ley de bases, que incluye una reforma laboral que ataca derechos de derechos de millones de trabajadores, en el marco de un escenario donde la política oficial de ajuste empuja para abajo el consumo y el nivel de vida de las mayorías populares.

Estas subas se producen, además, en el marco de una crisis social que implica -se estima- que más un millón de chicos no tenga acceso a comida que les garantice poder cenar. Una situación social que se recrudece y está llevando a que distintos sectores de trabajadores llevan adelante paros y movilizaciones como los docentes en Neuquén (L.I.D.)