Los médicos de la Universidad de Tanta, Egipto, demostraron que el maíz Bt destruye el recubrimiento celular interno del intestino delgado en animales de experimentación. Esto aporta una prueba contundente más a la inestabilidad genética de los transgénicos y a la urgente necesidad de establecer el principio precautorio sobre su consumo animal y humano.
Desde hace mucho tiempo en todo el mundo hay una fuerte sospecha. Los alimentos transgénicos generan problemas de salud por sí mismos, (...)