Revés para el Gobierno: quedó en suspenso el tratamiento de la reforma laboral

Miguel Ángel Pichetto anunció que postergarán el tratamiento del debate en el Senado. “Hasta la nueva conformación del Senado y hasta que la CGT unifique en una sola voz” dijo el jefe de la bancada del FpV-PJ.

El gobierno quería una aprobación express del proyecto de reforma laboral. Para eso negoció algunos cambios con la CGT y el tema fue parte de las negociaciones por las contrarreformas con los gobernadores peronistas.

Sin embargo, los planes del gobierno sufrieron al menos un traspié. Según los propios medios oficiales, el bloque de Senadores del Frente para la Victoria decidió hoy postergar el debate de la Ley de Reforma Laboral hasta después del recambio parlamentario, que ocurrirá el próximo diez de diciembre. Así lo anunció hoy el jefe de la bancada opositora, Miguel Angel Pichetto, durante una breve conferencia de prensa al finalizar la audiencia en la que se dictaminaron las leyes de reforma previsional y la responsabilidad fiscal.

“Decidimos postergar el tratamiento de este tema hasta la nueva conformación del Senado y hasta que la CGT unifique en una sola voz si existe voluntad de avanzar en la reforma laboral”, señaló Pichetto.

De esta manera quedó suspendida la reunión de la Comisión de Trabajo y Previsión Social del Senado.

Entre sus argumentos, Pichetto reconoció que el proyecto viene recibiendo críticas de diferentes seccionales de la CGT del interior del país e incluso de sectores del Consejo Directivo de la Central. Recordemos que la Corriente Federal y el Moyanismo habían anunciado una posible movilización el día del tratamiento. Pero también se han realizado manifestaciones importantes en La Plata y el sindicalismo combativo ha mostrado su rechazo. "No queremos avanzar en la reforma y que después vengan los discursos por izquierda, críticos", afirmó el senador rionegrino.

No están claros los tiempos que siguen ahora. Aunque avanza en la negociación la reforma previsional y el pacto fiscal, la crisis del peronismo y la CGT le jugaron una mala pasada al gobierno, en medio de un creciente clima de malestar con su proyecto de flexibilización laboral. (LID)