El periodismo servil y el ocultamiento de la izquierda en Jujuy

Final de la apertura de las sesiones del Consejo Deliberante de San Salvador de Jujuy.

El intendente Raúl "Chuli" Jorge termina su discurso, la tribuna radical aplaude fervorosamente.

Las y los periodistas se disponen a tomar declaraciones a los diferentes actores presentes.

Silvano Pintos, periodista de Canal 4, sale al aire y comienza a entrevistar.

El sentido de importancia y la "jerarquía" de los entrevistados está planteado:

1. El presidente radical del Consejo Deliberante de "buen apellido", un profesional de familia tradicional jujeña. Bien hablado el señor.

2. Concejal de extracción peronista, un histórico, acostumbrado a ser un segunda linea y de allí llevar agua para su molino.

3. Concejal peronista, ignoto para la sociedad, un paracaidista, hijo de un ex gobernador de Jujuy en la época de los noventa. El cargo de concejal es un trampolín para los hijos de las familias tradicionales del peronismo.

4. Guillermo Alemán, concejal del PTS/FIT, trabajador municipal de la recolección de residuos, de sencillo vestir.

En las entrevistas a los tres primeros, Pintos solo les realizó una pregunta disparadora:
¿Que les pareció el discurso del intendente?
Solamente esa pregunta.

Nunca repreguntó, mantuvo el micrófono fijo y solo realizó acotaciones sin mayor importancia, solo asiente y respeta los tiempos de los entrevistados al hablar. Se lo nota cómodo.

Al entrevistar al concejal Alemán realiza la misma pregunta disparadora, Alemán responde, iniciando el testimonio, hablando de la detención la semana pasada de su compañera de Bloque, Andrea Gutierrez.

El periodista Pintos lo interrumpe bruscamente, le dice que responda lo que le preguntó, que eso ya lo sabe todo el mundo. Se lo escucha soberbio, chicanero, sobrador, con un cierto menosprecio hacia el concejal de Izquierda.

Alemán expresa que es importante remarcar lo de la detención y después continúa con su respuesta. Es coloquial, sencillo su hablar, popular.

A Silvano no le importa lo que expresa Alemán, lo sobra, lo desprecia. Mantiene el micrófono fijo y lo chicanea.

Alemán habla como un chico de barrio, un laburante. Un trabajador que llegó a estar a la par de los mismos de siempre. Un recolector de basura ahí, en medio de los patrones.

Pintos desprecia a los que llegan de los sectores populares y no responden lo que políticamente se tiene que responder.

Hace su trabajo de dar voz a los de siempre: a los socios de sus jefes.

Pintos es un desclasado, como muchas y muchos periodistas en Jujuy, que eligen estar del otro lado, como serviles voceros y voceras.

Pero solo son eso: Serviles voceros y voceras.