CORRUPCION Low cost: ¿otro negocio para beneficiar a empresarios amigos del Gobierno?

El Gobierno beneficio a empresas ligadas a la familia presidencial así como a funcionarios otorgando rutas aéreas locales e internacionales. Un nuevo negocio a costa de los trabajadores aeronáuticos.

El escándalo de Correo Argentino puso en primera plana uno de los tantos ”conflictos de intereses” que atraviesa al Gobierno de los CEO. Sin embargo, la historia no terminó allí por el contrario, el otorgamiento sin restricciones de rutas aéreas nacionales e internacionales a líneas de bajo costo (conocidas como Low Cost), podría convertirse en un nuevo problema para el Gobierno.

Una de las empresas a la cual se le otorgó el 100 % de las rutas solicitadas es la colombiana Avianca, la cual en marzo pasado adquirió la línea de la familia presidencial Macri Airlines. Macair, nombre bajo el cual se la conoce, pertenecía al Sideco Americana, integrante del holding Socma.

Según el periodista Alejandro Rebossio el dueño de Avianca, Germán Efromovich, le pidió a Mauricio Macri en una visita en la Quinta de Olivos realizada el año pasado, que convocara a audiencia pública para la concesión de rutas regulares. “En octubre se formalizó la transferencia de la aerolínea de los Macri a Avianca y al mes siguiente la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) llamó a la audiencia para el 27 de diciembre” indica Rebossio en una columna.

“Yo creo que no”, fue la respuesta del ministro de Transporte de la Nación, Guillermo Dietrich en una entrevista a radio La Red, respecto de la existencia de conflicto de intereses en la licitación de rutas aéreas.

Las sospechas no recaen solo sobre Avianca, sino también sobre Flybondi, cuyo dueño es Richard Guy Gluzman, quien fue vicepresidente de Pegasus Argentina, firma inversora cuyo titular fue el actual secretario coordinador de la Jefatura de Gabinete, Mario Quintana.

“Lo que el Estado está generando es que vengan empresas privadas, soliciten rutas en un sistema de competencia, y el Estado las otorgue”, indicó Dietrich.

Sobre Flybondi, indicó que Guy Gluzman “es un accionista entre tantos”, por lo que consideró que “no se crea un conflicto de intereses” dada su relación con Quintana. “Esa persona, que no sé cómo se llama, no está más en Pegasus y Mario Quintana tampoco”.

Precisó que en Flybondi "está un tal Cook -Julian, su presidente-, que es suizo, que tiene toda la historia en el mercado aeronáutico mundial, y junto a (Gastón) Parisier armaron la empresa y salieron a buscar inversores”.

Destacó que Cook y Parisier “consiguieron u$s 100 millones para invertir en Argentina”, y puntualizó que “el proyecto de Flybondi incluye dejar a nuevo el Aeropuerto de El Palomar (provincia de Buenos Aires) con una inversión de u$s 40 millones”.

“Esto significa que millones de personas que viven en el oeste del conurbano tendrán un aeropuerto para tomar una avión para todo el país, con piloto, tripulación y mecánicos argentinos”, remarco el ministro.

“Y lo que se está objetando acá, en un proceso completamente transparente, es que hay un señor que no lo conoce nadie, que es un accionista entre tantos, que hace siete años compartió un espacio de trabajo con Mario Quintana, que ahora está en el Gobierno”, puntualizó.

Dietrich evaluó que “es totalmente descabellado” el planteo de conflicto de intereses, y afirmó que “no hay causas abiertas, sino denuncias penales de kirchneristas que durante 12 años saquearon el país”.

“El mandato que nos dio el Presidente y el compromiso que tenemos los argentinos es una pelea a fondo, de raíz, contra la corrupción argentina. Y es lo que estamos haciendo. Y por eso todo lo que hacemos es transparente”, remarcó el ministro.

Las sospechas de conflictos de intereses e incompatibilidades en el Gobierno de Macri hicieron que la Oficina Anticorrupción tenga que abrir hasta ahora 80 expedientes. La existencia de empresas off shore utilizadas para la evasión y elusión impositiva, como se conoció a través de los Panama Papers, muestra que el discurso de transparencia pregonado por el Gobierno no es más que una falacia. Los distintos gobiernos a costa de perjudicar a los trabajadores y sectores populares, han hecho uso y abuso de las arcas del Estado para aumentar sus riquezas.